miércoles, 30 de diciembre de 2009

Feliz año nuevo


Esta mañana habia un camión municipal regalando ramos de flores. Anda, que gracioso. Me he acercado a por uno y les he preguntado el motivo de la campaña. Quizas la navidad, o alguna otra actuación altruista sea la razón de la generosa promoción. Pues no. Resulta que provenían de un decomiso que hicieron ayer en el aeropuerto de Foronda. Al parecer pillaron dos toneladas de cocaina ocultas en un contenedor de claveles. Incautaron todo el cargamento y ahora estaban repartiendo las ramos entre los paseantes.

Yo ahora estoy quedando como un caballero repartiendo los claveles entre las señoritas, avidas de atenciones, redimiendome de todas las desatinos cometidos durante el año.

He preguntado si en otro camion estaban repartiendo la farlopa pero me han dicho que no, que esa se la quedan ellos.




Bueno, pues eso, que tengais un año muy bueno

martes, 22 de diciembre de 2009

Concurso de carteles (II)


Aqui otro cartel que tambien he presentado y tampoco han seleccionado.

Este era para los carnavales de Vitoria, aunque aqui hay alguno entre los seleccionados que me convence bastante


viernes, 18 de diciembre de 2009

concuso de carteles


He hecho este cartel para el concurso de carteles de los Carnavales de Bilbao. Entre los 71 partcipantes han seleccionado seis para que se decida el ganador por votación popular. Como de costumbre no me he comido un torrao.
Entre esos seis no estaba el mio, que quedará para siempre en el olvido.

Y digo yo ¿esos seis preseleccionados son flojos o es que yo me ofusco y me ensaño con la competencia porque el mio no ha sido elegido? Abridme los ojos, amigos, decidme que cualquiera de esos seis es mejor que el churro malagueño que he presentado yo.

martes, 15 de diciembre de 2009

Grandes ciudades

Los paralelismos entre bilbao y NYC no se reducen al Guggenheim.

La sede central de las Naciones Unidas parece estar en Nueva York a orillas de East River. Este mérito debería ser suficiente para considerar a la ciudad como capital del mundo. Sin embargo, no es cierto. El trozo de terreno que ocupa la ONU no es territorio americano (alli estan los únicos bares de la ciudad en los que se puede fumar) y New York City no es capital de nada. Ni del mundo, ni de Estados Unidos. Ni siquiera es capital del estado de Nueva Cork (La capital es un pueblillo llamado Albany)

Algo parecido le pasa a Bilbao que, pudiendo ser capital del mundo, no es ni siquiera capital de Euskadi, razón por la cual me tengo que desplazar diariamente a ese despoblado llamado Vitoria-Gasteiz, atravesando ventiscas y nevadas.


Que dura es la vida del funcionario aventurero!

viernes, 11 de diciembre de 2009

Guggenheim

El éxito alcanzado por el Museo Guggenheim de Bilbao despertó el olfato comercial de los neoyorkinos. Es habitual que las grandes ciudades tienden a copiarse entre si lo modelos de reactivación económica, asi que la Fundación decidió abrir una sucursal en Nueva York. Como en Bilbao el edifico había sido diseñado por el prestigioso arquitecto Frank Ghery, pensaron que tambien el de NYC tendría que ser un proyecto emblemático y se lo encargaron a Frank Lloyd Wright, uno de los arquitectos de mayor renombre en su tiempo.

Wright fue el principal exponente de la arquitectura orgánica, caracterizada por prescindir de los espacios compartimentados y por proyectar edificios abiertos al exterior mediante cubiertas planas y terrazas, con abundante luz natural e integrados en el entorno. Además, es relevante su uso innovador de los materiales y su visión para integrar los edificios en su entorno y en la naturaleza.

Creía firmemente en la importancia de la educación y fundó su propia escuela de arquitectura en su residencia de Taliesin (Spring Green, Wisconsin), donde formaba a sus alumnos en materias tan dispares como música, danza o escultura.

martes, 8 de diciembre de 2009

sobakoh


Debo matizar que lo manifestado en el post anterior tiene excepciones. No todos los establecimientos hosteleros tienen algún latino en su plantilla. Por ejemplo, en el restaurante japonés Sobakoh no creo que trabajara ninguno, porque en tal caso le hubiera explicado al propietario lo poco atractivo que resulta su nombre comercial para la clientela hispanohablante.

Por lo demas, preparaban una tempura exquisita.


viernes, 4 de diciembre de 2009

latinos


Los inmigrantes latinoamericanos han sido de los últimos en llegar, así que, a día de hoy, ocupan el escalafón mas bajo en el espectro laboral. De ahí que la hostelería esté plagada de hispanos, que a menudo trabajan para jefes italianos o irlandeses.

Esto que, sin duda, es una desgracia para los latinos, es una ventaja para el aventurero, poco dotado para los idiomas, que se pasea por el mundo con autosuficiencia lingüística. Prácticamente en todos los bares y restaurantes hay algún camarero que habla castellano y te evita que acabes pidiendo mollejas cuando lo que quieres es una tarta de manzana.

Como ejemplo os pongo el dibujo de un chicano que curraba en un burguer y tenia una peinado que ya lo quisiera Don King.


martes, 1 de diciembre de 2009

tennements


Desde el siglo XIX, el Lower East Side era el primer sitio donde se asentaban las grandes oleadas de los inmigrantes llegados desde Europa. Barrio mísero junto a los muelles, en unas pocas manzanas se hacinaban mas de 200.000 inmigrantes, sobre todo judios.

En la calle Orchard, cerca del Five Points donde luchaban los gangs of New york, de la Peículca de Scorsese, se ha levantado un museo que recrea las condiciones de vida de aquellos inmigrantes. Un homenaje a las vidas de todos aquellos que se dieron de bruces con el sueño americano. Atravesaron el océano en busca de fortuna y solo encontraron hambre y penuria.

Se trata del Tenement Museum. Los Tenement eran pequeños pisos compartidos por varias familias. El museo ha mantenido varios Tenement en el número 97 de la calle Orchard, tal y como eran, y ha reconstruido la experiencia de dos familias que lo habitaron en épocas distintas: Los Grumpetz, venidos de Alemania, y los Baldizzi, de Sicilia.

Natalie y Julius Grumpetz se establecieron allí en 1870 y allí tuvieron a sus cuatro hijos. En 1874, un año después de la gran depresión que sacudió America, Julius desapareció, de la noche a la mañana, sin dejar ni rastro y nunca mas se supo de aquel cortador de tacones para zapatos. Natalie tuvo que arreglarselas sola para sacar adelante a su prole.

Los Baldizzi llegaron en 1928 desde Palermo, y tambien les tocó vivir tiempos de mucha pobreza. La Ayuda Social Municipal les daba cajas de queso, en las que el marido después plantaba margaritas para animar a su esposa, que tanto añoraba los campos de Sicilia.


jueves, 26 de noviembre de 2009

Chinatown


En el dibujo la tienda mas antigua de Chinatown, Quong Yuen Shing & Co. Además de ultramarinos también servia de oficina de correos, prestamista para los emigrantes asiáticos y lugar de encuentro.

Muy cerca se reunían los Tongs, una especie de sociedades secretas dedicadas, en principio, a proteger los intereses de sus miembros, aunque en realidad manejaban todas las actividades delictivas del barrio. En 1870 ya controlaban la prostitución, el juego, la usura y los fumaderos de opio.

En 1924 la Guerra de los Tongs asoló Chinatown, con el enfrentamiento entre los Hip Sing y los On Leong que se disputaban el control de las calles. Durante cinco años abundante hemoglobina fluyó hacia las alcantarillas del bajo Manhattan

Actualmente los Tongs son asociaciones culturales y sociales que proporcionan auxilio a los recién llegados y los días festivos organizan larguísimas sesiones de estridente ópera china.


domingo, 22 de noviembre de 2009

Central park

En el año 1929, desde un escenario de Broadway, Groucho Marx analizaba la crisis económica con reflexiones que hoy resultan de rabiosa actualidad: "Yo no entiendo mucho de economía, pero sé que cuando los neoyorkinos alimentan a las palomas de Central Park la cosa va bien, pero cuando son las palomas de Central Park las que alimentan a los neoyorkinos hay que empezar a preocuparse"

jueves, 19 de noviembre de 2009

Zona 0


Tal que el 11 de septiembre bajamos hasta la zona cero. Se cumplían ocho años desde que dos aviones secuestrados derribaron la torres gemelas del World Trade Center, dejando una huella de devastación en la ciudad como no habia conocido en toda su historia.

Allí sigue sin haber nada, solo grúas y un inmenso agujero rodeado por un alta valla, como para ocultar a los viandantes el contorno de la devastación.

Llueve intensamente y un viento implacable azota la mañana, acentuando el dramatismo de los actos de duelo. Tristes melodías interpretadas por una banda de música del Cuerpo de bomberos, en uniforme de gala, inundan el aire de solemnidad, mientras familiares y allegados leen en público la lista de todas las victimas en un intento vano de rescatar sus nombres del olvido.

Unos manifestantes llevan unas pancartas que dicen “The 11/S was a inside job”


lunes, 16 de noviembre de 2009

San Gennaro





La mejor época para visitar Little Italy es mediados de septiembre, cuando se celebran las fiestas de San Gennaro, el santo napolitano que licua su sangre cada año.

Es una celebración popular y verbenera, muy del gusto del aventurero.


Sacan al santo en procesión, y los parroquianos recubren su manto con piadosos dólares. En los puestos de comida brillan las manzanas de caramelo junto a montañas de salchichas del grosor de un brazo. El olor de la fritanga embriaga todos los sentidos.

Entre las casetas de tiro de temática variada, destaca esa en la que cuando se acierta a una diana, se acciona un mecanismo que hace caer a un payaso en un tanque de agua gélida.

Y las atracciones de feria son de traca. Había incluso un carromato en el que se exhibia a la Niña-cocodrilo, burdo hibrido de humano y lagarto, que aguantaba con estoicismo las preguntas de los borrachos.

En fin, como una fiesta de pueblo de los años sesenta pero en el centro de Nueva York.


viernes, 13 de noviembre de 2009

Little Italy


Little Italy está siendo progresivamente devorada por Chinatown. Los chinos han desplazado a casi todos los italoamericanos, que se han ido trasladando a otras zonas mas periféricas, refundando sus comunidades en Brooklyn y Queens. Actualmente Little Italy se reduce a las calles Mulberry y Bleecker, donde todavía quedan un puñado de buenas pizzerías y trattorias.

Aunque algunos de estos ristorantes los regentan orientales, el barrio todavía conserva un poco de ese sabor napolitano, y cuando miras hacia las azoteas no te cuesta imaginar a un joven don Vito Corleone tratando de prepararle una emboscada al viejo capo de la mafia local.

Precisamente hasta hace pocos muchos años se paseaba por Little Italy Vincent Chin Gigante, un esquizofrénico vestido con pijama y gorro de lana, hablando solo y boxeando con su sombra. Los turistas no podían sospechar cuando se cruzaban con este tonto del barrio que era el hombre que dirigía personalmente el clan Genovese, la familia mafiosa más sanguinaria de Nueva York. Durante años se hizo pasar por loco y le funcionó hasta que en 2002 fue detenido y reconoció todo el montaje ante la fiscalía.


miércoles, 11 de noviembre de 2009

El rey Kong

De las muchas imágenes memorables que nos ha ofrecido el Empire State, ninguna tan fascinante como la de King Kong encaramado en lo alto de su estructura derribando aviones como si fueran insectos.

El enamoradizo simio arrancado de las junglas protohistóricas de la Isla clavera, encuentra serios problemas para adaptarse a la civilización.
Rompe sus cadenas, recoge a su chica y se refugia en las alturas, en lo que entonces era el techo del mundo. Alli, cerca de las estrellas, se siente seguro, pero entre la artilleria aerea y las reticencias de la bella acaban derribando a la bestia.

Al respecto Enric Gonzalez cuenta una historia graciosa: En 1983 para celebrar el cincuenta aniversario del estreno de la película, un empresario californiano especializado en fabricar muñecos hinchables ofreció a los propietarios del Empire construir un King Kong de plástico de 40 metros, pagando él mismo los 100,000 $ que costaría, a cambio de la publicidad que iba a suponer.

El dia del evento la lona del muñeco se rasgó con el viento y se desinfló. El gigante se quedó como un colgajo negro bamboleandose y rompiendo cristales y ventanas con las sacudidas del viento, mientras los aeroplanos contratados dieron unas vueltas alrededor del trapo, sin saber muy bien que hacer, lo que debió dar mas sensación de fiasco al espectáculo.

Al final esta burda réplica infringió mas daños al edificio que los que causaba en la ficción cinematográfica y el coste de las reparaciones superó con mucho el presupuesto de la película.

martes, 10 de noviembre de 2009

desconocidas



Precisamente en el Meat packing district nos cruzamos con estas chavalotas. No tenemos ni idea de quienes eran pero debian ser famosillas porque tenian una nube de paparazzis alrededor. Yo me sumé a los profesionales y les tiré una foticos, mientras la aventurera suspiraba "ya está éste otra vez".
Teneis idea de quienes pueden ser? Os suenan de algo?

domingo, 8 de noviembre de 2009

El Distrito de la carne


Una zona que se ha puesto muy de moda es el llamado Meat packing District, al oeste del Grenwich Village, a orillas del Hudson.

Hasta hace muy poco había allí más de 200 mataderos, desde donde se repartía la carne a los restaurantes y carnicerías de la ciudad y alrededores. Además había unos cuantos antros propios de los suburbios portuarios, frecuentados por prostitutas, matarifes y nocturnos irredentos. Las drag queens se apostaban en las esquinas oscuras y las ratas llevaban una opulenta existencia gracias a los despojos cárnicos que iban arramplando.

En los últimos años la zona ha experimentado un cambio radical. Aun quedan treinta y tantos empaquetadores de carne, pero ahora conviven con las tiendas de moda más caras y los diseñadores más exclusivos, Stella McCartney, Lucy Barnes o Alexander McQueen, y unos cuantos restaurantes clubs de demasiado postín. Las botas encharcadas de sangre de los matarifes resuenan en los mismos adoquines que los tacones rojos de los Louboutin de las top-models. Un barrio de contrastes excesivos, al que yo no acabé de pillarle la gracia.

Lo que sí me gustó fue una especie de jardín recién inaugurado, que discurre sobre la antigua vía de una línea de metro elevado. Entre otros muchos detalles, habían puesto tumbonas para que la gente pueda tumbarse un rato al sol, infraestructura que yo aproveché para echarme una siesta de Padre nuestro y orinal.


jueves, 5 de noviembre de 2009

The Flatiron

El trazado transversal de Broadway deja curiosos edificos en las esquinas, al cruzarse con las avenidas. Uno de los mas emblemáticos es el Flatiron, en el cruce con la calle 23 y la 5 avenida, que surge como una afilada proa de barco, apuntando hacia Times Square.

Su verdadero nombre es el Edificio Fuller, pero todos lo conocen como el Flatiron, por su parecido con una plancha. Construido en 1903 por el arquitecto Daniel Burnham, de la escuela de Chicago, alcanza los 87 metros de altura y su fachada sigue las proporciones de las columnas griegas clásicas. Un siglo después de su construcción, el Flatiron sigue siendo un hito arquitectonico.

La forma aerodinámica del edificio tuvo tambien un efecto perverso: cambió el curso de los vientos en la zona produciendo un efecto chimenea. A menudo la policía tenia que expulsar a los mirones que se apostaban en la calle 23, porque el viento levantaba las faldas de las mujeres que pasaban y dejaba al descubierto, en toda su plenitud, sus excitantes tobillos. Con el tiempo se extenderia el término “hacer la 23” para denominar a las practicas de voyeurismo.

Yo mismo fui varias veces desalojado de la zona por las fuerzas del orden. “Tu, flatirón, vete a hacer la 23 en otra parte” me decian. Hasta que descubrí la Semana de la moda.


martes, 3 de noviembre de 2009

Broadway!

Moverse por Manhattan es bastante fácil, gracias al trazado rectilineo del mapa. Una docena de avenidas recorren la isla longitudinalmente de norte a sur, con el eje central de la 5ª que divide el este y el oeste. Y en perpendicular las calles, que atraviesan la isla a lo ancho, siguiendo una numeración correlativa desde Houston hasta la ciento y pico en Harlem. Cada ocho calles o así hay una mas ancha con doble sentido de circulación.

Broadway, una de las pocas calles que rompen la cuadricula, les salió torcida. Y es que Broadway sigue el serpenteante trazado de un sendero de caza de los indios algonquinos, los mismo que les vendieron Manhattan a los colonos holandeses por 24 dólares. En aquella época los castores abrevaban en Times Square y los pumas acechaban en los bosques de Harlem. Poco que ver con el bullicioso Broadway actual, plagado de teatros y luces de neon. Es el reino del music hall, con obras que llevan decadas en cartel. "There is not business like show business”.


Por esos escenarios han pasado Orson Welles, Katherine Hepburn, Judy Garland, James Dean, Paul Newman, Dustin Hoffman, Antonio Banderas, Yul Brynner. Todos los grandes actores han querido sentir el calor de los aplausos en directo, y que mejor sitio que Broadway para probarlo.

viernes, 30 de octubre de 2009

Edificio Dakota

En 1880 cuando Edward Clark, el dueño de las maquinas de coser Singer, decidió construir un bloque de apartamentos eligió el Upper West Side de Manhattan, en lo que ahora es la calle 72, junto a Central Park West. En aquella época aquello debia ser un descampado tan remoto, que un amigo le comentó “para eso podias hacerlo en el estado de Dakota”, asi que el edificio se quedó con el nombre de Dakota. La extraña escultura de un indio en la fachada celebra la ocurrencia.

Quizas sea este indio el que atrae la maldición hacia el hombre blanco, pero lo cierto es que en este el edificio se han repetido sucesos trágicos y misteriosos durante toda su historia.

Boris karloff, uno de sus celebres inquilinos organizaba frecuentes sesiones de espiritismo, y el dia que murió los vecinos tuvieron que abandonar el edificio porque se movian hasta los lavabos. Por aquellos tiempos tambien lo frecuentaba el conocido brujo Aleister Crowley, que organizaba alli rituales satánicos en los que convocaba a las fuerzas más oscuras de la naturaleza.

Algo de eso debía saber Polanski cuando eligió el Dakota para rodar Rosemary´s baby (la semilla del diablo), una de las películas de terror mas perturbadoras de todos los tiempos. En una escena hace una breve aparición Sharon Tate, la mujer de Polanski. Poco después del estreno, Sharon, en avanzado estado de gestación, y otros cuatro amigos fueron salvajemente asesinados por Charles Manson y su lisérgica familia.


Pero seguramente el suceso mas famoso sucedió el 8 de diciembre de 1980, cuando Mark David Chapman espero a las puertas del Dakota a Jonh Lennon, que horas antes le habia firmado un autografo, y le pegó cinco tiros dejandole mas seco que la mojama. Curiosamente y como para cerrar el círculo, uno de los personajes que aparecen en la portada de Sargeant Peaper, el disco de los Betales, es Aleister Crowley, el famoso satanista que organizaba sus misas negras en el Dakota. Que movida ¿no?


miércoles, 28 de octubre de 2009

McSorley



En la calle 7, entre las Avenidas Segunda y Cooper, rodeado del vecindario estudaintil del East Village, se encuentra la taberna McSorley que pasa por ser la mas antigua de NYC.

La abrió en 1854 un irlandés llamado Jonh Mc Sorley y desde entonces apenas ha experimentado ningún cambio. Sigue en manos de la misma familia y parece que a ninguno de ellos les molesta el polvo y el serrín acumulado durante un siglo y medio. La única novedad es que recientemente se ha añadido un WC para mujeres, instalación innecesaria hasta 1970, año en que el saloon levantó el veto a la presencia femenina.

Una de las características más sorprendentes del local es que te sirven el doble de lo que solicitas. Si pides un whisky te sacan dos. Si pides tres cervezas te sacan seis. No me preguntéis porqué, yo tampoco lo entiendo.

Una vieja tablilla de madera colgada entre las mugrientas fotografías que saturan las paredes resume la filosofía del viejo McSorley: “Be Good or Be Gone” (pórtate bien o vete), y me hace imaginar antiguas trifulcas tumultuarias, cortadas de raíz por los camareros arrojando por la ventana a los alborotadores ebrios entre el jolgorio general.

Otro cartel mucho mas reciente, con la foto de un gatito, anuncia triunfante a su clientela: “el pequeño Winny ya ha sido encontrado”.


viernes, 23 de octubre de 2009

Edificio Chrysler



El Chryler Building fue durante unos meses el edificio mas alto del mundo, hasta que el Empire State le arrebató el título. Pero sigue siendo el mas hermoso de todos, con sus 17 ascensores art decó, todos distintos, sus expresionstas aguilas de acero, su estilizada cúpula y su decoración imitando piezas de los coches

Y es que su promotor Walter Percy Chrysler era un magnate de la industria automovilística, aunque empezó de aprendiz en un taller del Union Pacific. Uno de esos self made man que tanto gustan a los americanos.

Quiso construir un templo a su vanidad en el centro de Manhattan, para lo cual contrató al joven arquitecto Willian Van Alen. Y quiso que su rascacielos fuera el que rascara los cielos a mas profundidad. Para conseguirlo tuvieron que engañar a la opinión pública y sobre todo al banco de Manhattan, que estaba construyendo un rascacielos de 47 pisos en Wall street.

Van Alen anunció que el edificio Chrysler tendría 68 plantas y mediría 270 metros. Inmediatamente el Banco de Manhattan y su arquitecto Craig Severance (antiguo socio y después enemigo declarado de Van Allen) modificaron su proyecto y lo ampliaron hasta 280 metros.

Pero Van Alen se guardaba un as en la manga. Habia construido en secreto una larga aguja, que mantenía oculta en el hueco de un ascensor. El 23 de octubre de 1929, una vez que se habia inaugurado el Manhattan bank (el proyecto final llegaba hasta los con 308 metros), Van Alen sacó su aguja de 27 toneladas y la coronó en el edificio Chrysler a 318 metros de altura. De esta manera se convirtió en el edificio mas alto del mundo. ¡Chupate esa, banco de Manhattan!

Al dia siguiente ningun periodico reflejó la noticia. El repentino desplome de la bolsa de Wall street que arruinó a medio mundo acaparó todos los titulares.


miércoles, 21 de octubre de 2009

Semana de la Moda

Como os decía en el post anterior, en Bryant Park se estaba celebrando la Semana de la Moda de Nueva York, la que marca las tendencias que luego seguirán las demas pasarelas. Aquello era mi sueño hecho realidad: las mujeres mas hermosas del planeta, con unos vestidos ridículos y minúsculos, reunidas bajo esa carpa. Alli pasé largas horas haciendo guardia con mi máquina de retratar. Las horas mas felices de mi vida.

La aventurera, que no comparte mi interés por el mundo de la moda, se opuso al evento con tanta rotundidad como unos manifestantes travestidos que protestaban en las inmediaciones portando pancartas con el lema “Feed the models!” (alimentad a las modelos!)


lunes, 19 de octubre de 2009

Ajedrez en Manhattan

En una esquina de Washington Square se suelen juntar los aficionados al ajedrez. Ya en su día iba a jugar allí el joven Bobby Fisher, probablemente el mejor jugador de todos los tiempos. Me acerqué una tarde por allí con idea de echar unas partidillas. Hubiese preferido ir al Manhattan Chess Club, donde se quedó seco Capablanca, pero por lo visto ya lo cerraron.

Un tipo me invita a jugar. “One play, five” me dice, y yo entiendo que quiere jugar a cinco minutos. OK. Pierdo la partida y mi contrincante me suelta “give me five, man”, que yo traduzco mas o menos como “choca esos cinco”. Craso error: En realidad, me está reclamando los cinco dólares que habíamos apostado, sin yo saberlo. Aclarada la confusión, le propongo una revancha. Le gano y quedamos en paz.

Otro día, juego con un venerable jubilado. “One play three dolars, two play five dollars” me dice antes de empezar. OK, digo. Ganamos una cada uno y yo entiendo que quedamos económicamente en paz (“on peace”). Nuevo error: El abuelo cobra por jugar, como si fuera Alekhine, pero siendo mas malo que el sebo (“more bad than grease”). Le pago los cinco dólares a regañadientes. Luego aparece un puertorriqueño, me desafía y yo entro al trapo. Me gana unas cuantas partidas y 20 dólares, pero a este por lo menos le entiendo cuando me habla y sé lo que me estoy jugando.

Para evitar que me siguieran desplumando, me fui a jugar a Bryant Park, otro parque al que también acuden ajedrecistas, pero por el mero placer de jugar y sin el afán de lucro que tenían esos sacacuartos de Washington Square.

Además en Bryant Park, a escasos metros de donde jugábamos, se celebraba la Semana de la Moda de Nueva York… pero eso es otra historia.


jueves, 15 de octubre de 2009

Rockefeller


El Rokcefeller Center es un complejo comercial en el Midtown, entre las avenidas 5ª y 6ª, con catorce edificos de estilo art decó, el mas alto de 256 metros.

El viejo Jonh D. Rokcefeller compró el solar en 1929 y de pronto le pilló el crack de Wall Street, con el faraónico proyecto del Radio City apenas empezado. Tampoco debió preocuparle mucho ya que Rokcefeller pasaba por ser el hombre mas rico del planeta, y no pensaba escatimar en el complejo

El despliegue fue tal que el magnate del petroleo intentó contratar a Matisse y Picasso para la decoración de los murales del vestíbulo, aunque finalmente hubo de conformarse con Diego Rivera y Sert para tal propósito.

A Rivera, mejicano y comunista, debió de despertarle algunas contradicciones trabajar para el paradigma del capitalismo americano, pero veintiún mil dólares y la promesa de trabajar con total libertad disiparon sus dudas. Asi empezó a trabajar en “El hombre en el cruce de caminos viendo con esperanza y alto espíritu al elección de un futuro mejor”, mural en el que incluyó escenas del mundo socialista, con marchas del primero de mayo y un retrato de Lenin saludando a negros, niños y proletarios. Esta escena enseguida encendió la polémica y enfureció a Rockefeller, que liquidó la deuda con el artista y suspendió los trabajos.

En la medianoche del 9 de febrero de 1934, el mural de Rivera fue demolido. A pesar de que los expertos habían explicado el modo de retirarlo, sin daños para el mismo ni para la pared, y que había entidades dispuestas a cubrir los gastos, la decisión de Rockefeller fue reducirlo a polvo.


martes, 13 de octubre de 2009

La libertad iluminando el mundo

La estatua de la Libertad, cuyo verdadero nombre es "la libertad iluminando el mundo" era lo primero que veian los inmigrantes cuando llegaban a Nueva Cork, a traves de la isla de Ellis.

Este coloso fue un regalo del pueblo francés, siempre dispuesto a conmemorar cualquier derrota de los ingleses, con motivo del centenario de la independencia norteamericana en 1884.

Solo la estatua mide 46 metros y la estructura metalica interior fue diseñada por Eiffel. Se puede coger un ferry gratuito que va a Staten Island y pasa muy cerca de la estatua, aunque por unos cuantos dolares tambien se puede ir hasta alli y recorrerla por dentro. Esto me recuerda un comentario de Woody Allen en una de sus películas, lamentandose de su escasa actividad sexual: “la última vez que estuve dentro de una mujer fue cuando fui a visitar la estatua de la Libertad".


miércoles, 7 de octubre de 2009

East Village

Desde la segunda guerra mundial el East Village ha sido refugio de artistas y bohemios. En la decada de los 50 se instalaron alli los escritores beatnics, Jack kerouak, Burroughs, Allen Ginsberg, Norman mailer. Tambien artistas como Andy Warhol, y músicos como Charlie Parker, Thelonius Monk o Jimi Hendrix.

Bob Dylan seguia el rastro etílico de su homónimo Dylan Thomas, y las primeras crestas punkies se paseaban por el barrio. Talking heads, Blondie y Los Ramones empezaron a hacer sus pinitos en el CBGB entre la 1ª y la 2ª y Joey Ramone tenia una calle dedicada junto a Bowery.

En los años 80 y 90 el crack irrumpió en las calles y el East Village pasó de ser una zona alternativa a marginal y peligrosa. Hasta que llegó el alcalde Giulianni y empezó a repartir estopa entre los malosos. Entonces llegamos los agentes gentificadores y los precios de los alquileres se dispararon con la misma alegria que antes se disparaban los King Cobra de calibre corto.

domingo, 4 de octubre de 2009

Tengo un apartamento en New York


En este edificio teniamos nuestro apartamento: estaba en la calle 6, entre la primera y la segunda avenida, en el East Village, una zona muy animada a cualquier hora del dia, con gran variedad de bares y restaurantes y sin la vorágine opresiva del Midtown.

Era uno de esos edificios de ladrillo rojo, con cuatro plantas, con escalera exterior de incendios. Se lo alquilamos a un colombiano muy simpatico que, quien sabe con que oscura financiación, se habia hecho con un pequeño imperio inmobiliario en la zona.


viernes, 2 de octubre de 2009

bridge


El aventurero contempla el Brooklyn Bridge y le resulta tan familiar como el puente de san Antón. Y es que esa es una de las ventajas de viajar a NYC: que todo se te hace conocido. Han sido tantas las referencias que a lo largo del tiempo hemos acumulado mas o menos inconscientemente, sus imágenes han pasado tantas veces por nuestras retinas, que uno tiene la sensación de que ya ha estado alli anteriormente. (En el caso del aventurero es lógico, por que él efectivamente ha estado alli con anterioridad, hace casi veinte años) Pero eso no mitiga el asombro del primer encuentro, sino que mas bien lo facilita y lo concreta. Es como si viajas por un lugar remoto y te encuentras inesperadamente con un amigo de la infancia.

Poco a poco una imagen borrosa en la memoria se me fue haciendo mas nítida: era Tarzán lanzándose al agua desde los tensores del puente de Brooklyn, perseguido por unos zoologos con pocos escrúpulos.



miércoles, 30 de septiembre de 2009

arrive to NYC

El 6 de septiembre llegamos a la Terminal 7 del aeropuerto JFK, de New York City. Nada mas desembarcar los servicios de inmigración me plantean unas cuantas cuestiones: si he participado en el genocidio nazi, si estoy involucrado en espionaje, si he cometido algún atentado terrorista, si porto armas, explosivos o jamón de jabugo. ¿Serán preguntas trampa? Por si acaso contesto a todo que no.

“¿Planea atentar contra el presidente de Estados Unidos?” les respondo que no me he planteado demasiado ese asunto pero que Obama me parece un tipo simpático y que en principio pienso respetar su vida. Me dejan pasar amablemente, advirtiéndome de que si cambio de intenciones se lo comunique a la mayor brevedad. “No se preocupe, agente, usted será el primero en saberlo”.


La aventurera sin embargo es retenida durante unos minutos en un módulo de aislamiento, donde se confiesa culpable por dos o mas delitos que involucren depravación moral o violación respecto de una sustancia controlada.

Sin mas contratiempos, nos dirigimos al corazón de la Gran Manzana.

viernes, 25 de septiembre de 2009

San Andrés de Teixido

"en la pared un mapamundi, y colgando del ártico, entre Groenlandia y los mares cálidos, un rácimo de figuritas de pan de San Andrés de Teixido"

Manuel Rivas
Cuando vayais a Galicia un sitio que no podeis dejar de visitar es San Andres de Teixido. Y no se trata de una recomendación, es simplemente quer no podeis dejar de visitarlo, porque a San Andres de Teixido "vai de morto o que non vai de vivo", o sea que si no vas de vivo, iras de muerto. Asi que hay por alli un trajín tremendo de almas en pena que vienen post mortem a cumplir con el santo, a menudo reencarnados en forma de pajaros, hormigas u otros animalillos, en un sincretismo religioso muy poco ortodoxo.

El origen de este peregrinar se encuentra en un ataque de celos del santo. Parece que San Andres tenia envidia de Santiago al ver a tantos pregrinos dirigiendose a su tumba, asi que rogó para conseguir un pouco de seguimiento. Y hete aqui que el mismisimo Dios se le apareció en persona y, cansado de sus lamentos, le concedió nada menos que la peregrinación universal. Todo ser humano habría de pasar por alli, en vida o despues de diñarla. El que no llora no mama.

Asi que os recomiendo que vayais a San Andres de Teixido cuando aun esteis vivos, que una vez difuntos vete tu a saber si no será mucho mas lio.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Combarro

Tambien estuvimos por Combarro, pueblo pintoresco y uno de los núcleos pesqueros más hermosos de la costa gallega.

A lo largo de la calle que da a la ria se alinean mas de 30 horreos sobre la base granítica del puerto, en una especie de muralla que separa el mar del casco histórico, salpicado de cruceiros. “Onde hay un cruceiro, hubo un pecado” decia Castelao.

Los horreos de Combarro tiene la particularidad de que, a diferencia del uso agrícola que se les da en el resto de Galicia, aquí se utilizan como secadero de boquerones, sardinas y otros pescados típicos de la Ría.

Por cierto, ahora estoy en Nueva York




martes, 8 de septiembre de 2009

mas carnaza


Aquí podemos ver a las colaboradoras del aventurero haciendo un posado veraniego con sus encantos a la vista. La imagen se tomó en la playa de Barra, al final de la Ria de Vigo, en un dia asueto tras varias jornadas de trabajo agotador.

viernes, 4 de septiembre de 2009

BURACO


La población de la isla de Oms vivía aterrorizada por los lamentos que surgían de una enorme sima inexpugnable que se hundía hacia el mar, junto a los acantilados. Tanto era el pavor que les inspiraba que lo llamaban O Buraco do Inferno.

Con el propósito de aclarar el misterio, el aventurero y sus colaboradoras se trasladan hasta la isla de Oms, en plan Scooby Doo.

Tras investigar sobre el terreno, realizar mediciones y tomar muestras con la ayuda de sofisticado instrumental, llegan a la concusión de que los sonidos provienen del batir de las olas en el fondo del buraco y de alguna gaviota despistada que se cuela por ahí.

Otro caso resuelto. Ahora los isleños de Oms vuelven a dormir tranquilos como bebes, que da gusto verlos.


miércoles, 2 de septiembre de 2009

Bueu



El aventurero recaló en la onomatopéyica localidad de Bueu, en la ria de Portevedra, peninsula de Morrazo.

Una tarde cuando hojeaba la prensa junto a la playa de este tranquilo pueblo pesquero, el aventurero descubrió maravillado a una manada de no menos de doce delfines que retrocigaban a apenas unos metros de la orilla. Ni siquiera la sensata oposicion de sus colaboradoras pudo impedir que se metiera al agua a bañarse con aquellos simpáticos cetáceos odontocetos.

lunes, 31 de agosto de 2009

A Santa Compaña

Aunque era tarde ya, me había aventurado mas allá del collado para recoger unas raíces de tejo y unas alas libélula, que tengo oído que la infusión hecha con estos ingredientes es de gran alivio para los orzuelos, la morriña de noviembre y los sarpullidos en la rabadilla, mal este último que me aquejaba por aquellos días. No me gusta andar por esos parajes después del crepúsculo, porque los paisanos dicen que se ven allá cosas muy extrañas y que las piedras albergan espíritus nefastos que se enroscan en las orejas de los pastores extraviados y les susurran palabras blasfemas. Si embargo me alejé demasiado en pos de unas libélulas no acababan de aparecer, cuando súbitamente la noche extendió su tenebroso manto. En la oscuridad ya no fui capaz de reconocer el camino de vuelta a la aldea y me resigné a pernoctar al raso.

Había pasado un largo rato y ya empezaba a conciliar el sueño, cuando escuché un rumor lejano que al poco fue haciéndose más nítido: voces susurrantes que salmodiaban en latín, lamentos de las almas en pena que no encuentran reposo. Al mismo tiempo empecé a distinguir una luz mortecina que se aproximaba por la vereda. “E cousa do demo” pensé y me alejé de allí a toda la velocidad que me permitía la espesa oscuridad. A tientas llegue hasta una encrucijada en el camino donde se alzaba un cruceiro providencial y allí me refugié.

Sin embargo la infernal comitiva seguía acercándose lentamente y ya pude verla con claridad, a pesar de que el sudor frío me empañaba la vista. Unos cuerpos etéreos de carnes pútridas y lívidos rostros, cubiertos por mortajas raídas, apenas alumbrados por las tenues llamas de sus candiles ¡La santa Compaña! En algún lugar tocaba a muerto el sordo tañido de una campana. El terror me paralizaba y nada podía ya hacer sino santiguarme y entregar mi pobre alma a aquel fúnebre cortejo. Pero cuando llegaron hasta mi vera, pasaron de largo, sin reparar en mi presencia. Ni siquiera parecían haberme visto. Acaso el influjo protector del cruceiro me hacía invisible a las cuencas vacías de sus ojos.

Como llegaron, se fueron. La luminaria se perdió en la noche pero la visión me había aturdido hasta tal punto que perdí el conocimiento.
Cuando desperté las tinieblas dejaban paso a las primeras brumas de la mañana. El único vestigio de la aberración era un intenso olor a cera y azufre. Me levante y volví al pueblo. No le hablé a nadie de aquello, ni volví jamás por aquellos lares y desde entonces cuando tengo orzuelos, morriña de noviembre o sarpullidos en la rabadilla, me voy a la botica y me compro un medicamento genérico homologado.

sábado, 29 de agosto de 2009

Mi equipo

Como veo que está bajando la audiencia os pongo un dibujo de estas dos pibones (en la realidad son mas guapas), que no son otras que mis colaboradoras, Irune y Txus. Expertas en gallegologia y artes marciales, ellas fueron mi fuente de inspiración en todo momento, y el báculo en el que me sostuve durante las adversidades.

Unicamente tengo una objeción sobre ellas: me tuvieron varios dias a bocadillos de mortadela, sustento a todas luces impropio de un aventurero. Un lacón con sus grelos, un pulpo a feira, unas zamburiñas, un churrasco, unos percebitos... que sé yo, cualquier cosa hubiese servido, pero comer bocadillo de mortadela en Galicia, manda carallo!


jueves, 27 de agosto de 2009

Riveira sacra


De camino hacia las rias baixas, hicimos una incursion en Ourense, por la zona de la Riveira sacra, donde el Sil forma unas hoces espectaculares. Las laderas que bajan hasta el rio estan pobladas por viñedos milenarios, plantados en tiempos de los romanos. Se vanaglorian los de la zona de que algunos de sus caldos eran gratos a Augusto, dentro de que los gallegos tampoco son muy de vanagloriarse y menos de lo que pudiera gustarle o no a un emperador romano.

miércoles, 26 de agosto de 2009

A mitra de ferro ardente

Atravesamos sin apenas detenernos por Monforte de Lemos. En opinión de mis colaboradoras es únicamente un importante nudo ferroviario. Sin embargo yo escucho las palabras que flotan en el aire. Palabras que me hablan de acontecimientos ocurridos hace mucho tiempo, allí arriba, entre el castillo condal y el vecino Monasterio de San Vicente del Pino.

Escucho los cascos del corcel del conde
, que parte a cumplir con encomiendas reales. Durante su ausencia, el abad de San Vicente se desplaza subrepticiamente por un pasadizo subterráneo que une ambos edificios. ¿No oís sus pasos furtivos? Llega hasta los aposentos del castillo y seduce a la esposa del conde, con la ayuda de una pócima que le ha sido facilitada por un herborista judío.

Regresa el conde y se entera del lance amoroso. Invita al abad a una opípara comida, le agasaja con su conversación. A los postres, un sirviente del conde trae una corona de hierro al rojo vivo, y se le coloca en la cabeza al abad, que muere entre espantosos alaridos de dolor.


Sobre esta truculenta coronación circulan por Monforte diferentes versiones: en unas, la seducida es la hija del conde en lugar de su esposa; en otras la represalia tiene su origen en una disputa relativa a la propiedad de ciertos terrenos que el conde reclamaba a la abadía. Quien sabe. Tampoco puede uno fiarse demasiado de las palabras que flotan en el aire.


domingo, 23 de agosto de 2009

Samos


Sigue el aventurero su particular peregrinaje por Galicia. Ya desvia su ruta del camino de Santiago, pero antes hace una parada en la gran abadia benedictina de Samos, a escuchar los ecos del milenario gregoriano resonando en el angosto valle.

Decia el Padre Feijoo, que fuera abad de este monasterio que “tan recogido, tan estrecho, tan sepultado está entre cuatro elevados montes, que por todas partes no sólo le cierran mas le oprimen, que solo es visto de las estrellas cuando las logra verticales”.

En el dibujo, la capilla del ciprés, celda monástica del siglo IX, núcleo original del monasterio y una de las pocas muestras de arquitectura mozárabe en Galicia.


miércoles, 19 de agosto de 2009

Xente do povo

Pero ¿quien sube al monte esas vacas que luego nosotros bajamos? MIGUEL. Con las primeras luces del alba Miguel se las lleva a los altos pastos para que saboreen la hierva fresca y alli se pasa las horas muertas, viendo rumiar a las vacas. A todas ellas, una veintena larga, las distingue y las conoce por su nombre (“A la rubia le gusta escaparse en cuanto puede, pero la mas lista es la marquesa “)

Miguel, como su hermano Edu, es castellano de Sasamon, aunque de muy joven se vino a trabajar a la margen izquierda del Nervion. Fue compañero del metal en la naval y mas de una vez hubo de trepar hasta la polea superior de la grua Carola para cambiar algun puntal. En los duros tiempos de la reconversión se reconvirtió y ahora amasa harina y agua obrando el milagro de trasformarlos en recias hogazas o estilizadas baguettes.

Pero lo que de verdad le gusta a Miguel es venir a Lousada. Desde hace 25 años, en cuanto coge sus vacaciones se viene a Galicia huyendo del mundanal ruido, esconde el reloj en un cajón y no lo recupera hasta el fatídico dia que marca el regreso en el calendario de los trabajadores por cuenta ajena.

Otro tipo curioso de Lousada es ANTOÑITO DE PEDERLADA, alquimista mineral y artista. Antoñito fue trotamundos en sus años mozos y regresó a su aldea natal en la edad tardia, para concentrarse en la labor atística. De su obra se desprenden evocaciones esotéricas que casan muy bien con la bruma del paisaje y el musgo de las piedras. A primera vista, intuyo referencias a los cultos solares celtas y los mandalas tibetanos.

Fuimos a su taller a saludarle, pero habia subido al monte a buscar silex, según nos dijeron dos peregrinos, ella belga, oscense él, a los que habia invitado a pernoctar en su casa aquella noche. Casi mejor asi. Que se mantenga el halo mágico. Yo prefiero imaginarme a Antoñito de Pederlada, como un druida que desaparece cuando se le busca y aparece cuando no se le espera, un nigromante de edad incalculable, iniciado en el Conocimiento, que acaso en el devenir de los siglos encontró el secreto de una juventud eterna y se muestra dispuesto a explicarselo a cualquiera que haga un alto en camino y se siente en el zaguan a platicar un rato.


lunes, 17 de agosto de 2009

Lucia


Lucia es una rapaza lozana y vivaz que se resiste al despoblamiento rural. Con sus 17 primaveras estudia en Sarria y atiende al ganado en la granja familiar. Vive en la aldea de san Roman, en la granja que le dicen "el castro", porque está asentada sobre un castro celta de tiempo inmemorial.

Al atardecer, pertrechados con sendas varas de avellano, subimos al monte a buscar a las vacas para estabularlas (me encanta esta palabra). Esta labor me sienta como un chute de plenitud. Le aseguro a Lucia que voy a recoger este momento en un dibujo y publicarlo en mi blog y le pregunto si maneja Internet. “¿y eso como se hace? ¿Con un palo?” contesta sarcástica la rapaza.

Lucia se rie de nuestra torpeza agropecuaria.
“Ayyyy, esta xente da cidade…” dice. Pero se equivoca. Nosotros ya no somos xente da cidade. Ahora somos xente do pobo, que hemos cambiado la urbe por la ubre. Ya no queremos pisar el asfalto, sino la senda empedrada y el camino forestal. Ya no queremos oir los claxon, sino las cigarras y el cencerro de las frisonas.


jueves, 13 de agosto de 2009

Lousada

El resol que se cuela entre la bruma hace brillar los tejados de pizarra.

Nuestra primera etapa en Galicia se desarrolla en la pequeña aldea lucense de Lousada, donde la aventurera tiene raices, parentela, y recuerdos de los veranos de la infancia que, como dice Rilke, es la unica patria.

Los familiares de la aventurera nos acogen entre esta bonita casa de Lousada y la granja del castro, en la vecina aldea de San Roman. Como agradecerles tantas atenciones a Edu, Charo, Manolo, Maria, Lucia, Miguel…

En el castro todo es algarabía: las ovejas balan, relincha el caballo, cacarean las gallinas, ladra el can, las vacas mugen... y elefantes non haylos, pero de haberlos barritarían. Nada de lo que comiamos en el castro se habia producido a mas de 50 metros. Incluso el pan era de elaboración propia, que lo cocían en su horno de leña. En el castro se comia de puta madre, carallo!

Entre Lousada y san Roman, un camino alumbrado por una hilera de generosas luciérnagas y coronado en el cielo por la pirotecnia de alguna fugaz estrella fugaz.

En los alrededores, una fraga profunda, poblada por castaños, hayas y robles centenarios (como ha de ser, que si no dispone de abundante variedad arborea no es fraga sino bosque). Tan frondosa y evocadora que nos parecía escuchar, acechante entre los helechos, al bandido Fendetestas ensayando el grito de “La bolsa o la vida, me caso en Soria!”


martes, 11 de agosto de 2009

17.000


Hoy cumplo 17.000 dias sobre la faz de la tierra. Entre esos 17.000 los ha habido buenos y los ha habido malos. No me quejo. A ver que tal los próximos 17.000.



domingo, 9 de agosto de 2009

Cebreiro

Onde irá aquel romeiro,
meu romeiro a onde irá?
Camiño de Compostela
non sei se ali chegará.-
Os pés leva cheos de sangre
Xa non pode mais andar
¡malpocado! ¡Pobre vello!
Non sei si ali chegará


Romance de Gaiferos de Mormaltan
Como los peregrinos compostelanos, alcanzamos Galicia por Cebreiro, entre ancestrales pallozas con techumbre de paja y vientos que baten desde los cuatro cardinales . Superado el alto de Piedrahita, el valle se abre exultante. Los estorninos vuelan en compacta bandada y los riachuelos murmuran muy antiguas historias.

Desde el confortable aire acondicionado de nuestro lujoso vehiculo, formulamos buenos deseos a los caminantes rezagados que, inmersos en sus cavilaciones, avanzan por la ruta jacovea y a los que ya sestean en una mansa orilla “¡ Boa sorte, pelegrins, ojala que o camiño os dei o que estais buscando!”


sábado, 25 de julio de 2009

Terra galega

Ya os comentaré mas cosas de Roma.
Ahora estoy de viaje por Galicia, ese terruño habitado por 2,8 millones de paisanos, 500 millones de árboles, un millón de vacas y un oso.


viernes, 24 de julio de 2009

teatro maritimo

Hay en la villa Adriana un rincón que tenía ganas de visitar desde que hace años lo ví en una escena del “El vientre del arquitecto”. Se trata del llamado Teatro Marítimo, un canal en forma de anillo que encierra una isleta donde había una pequeña villa con todo lo imprescindible. Alrededor del canal un corredor circular, porticado con cuarenta columnas jónicas.


A la isleta solo se podía acceder a través de un puente levadizo que se accionaba desde el interior. Este era el retiro del emperador, el lugar donde se refugiaba Adriano cuando queria estar apartado del mundo. De esta manera, la isla le aislaba, física y espirituamente. Funcionaba como una metáfora, pero tambien como una escenografía cósmica, un oratorio concentrico destinado a albergar al emperador divinizado bajo la cúpula celeste.


martes, 21 de julio de 2009

villa adriana

Con nuestro tino habitual, elegimos una mañana lluviosa para ir a visitar Tivoli, entre los montes tiburtinos y la campiña romana, a unos 30 kilómetros de la urbe. Nuestro destino era la Villa Adriana, donde el emperador romano (en realidad era de Sevilla y olé) Adriano pasó los últimos años de su vida.

Entre cipreses, pinos y olivos milenarios, el emperador mandó levantar edificios inspirados en grandes construcciones de Grecia, Alejandría o Asia Menor. No en vano Adriano fue un viajero incansable y había recorrido todos los rincones del imperio.

Nosotros, por el contrario, somos viajeros cansables, y para cuando llegamos a la Villa Adriana ya estabamos agotados, después de coger un metro, dos autobuses y una paseata de dos kilómetros bajo la lluvia.


lunes, 20 de julio de 2009

capuchinos


En plena Via Veneto, el centro de la vida mundana, la muerte exhibe su danza macabra: el cementerio de los frailes capuchinos de la iglesia de la Inmaculada Concepción.





Las paredes y techos de la cripta están decorados con los huesos de más de 4000 capuchinos muertos entre 1528 y 1870.

Al parecer el ayuntamiento ofreció a los capuchinos hacerse cargo de los esqueletos para trasladarlos a algún osario municipal. “Quita, quita” replicó el prior “con lo entretenidos que estamos haciendo manualidades con estas clavículas, vértebras y calaveras”.

Así, a lo largo de cinco capillas se suceden los ornamentos oseos en forma de lamparas, repisas y rodapiés. En la última de las capillas reza un cartel:
“Como vosotros, nosotros éramos.
Como nosotros, vosotros seréis”.


viernes, 17 de julio de 2009

Panem et circenses



A la muerte de Neron el antiguo lago de su Domus Aurea fue desecado hacia el Tíber y en su emplazamiento se levantó un monumental teatro: el anfiteatro Flavio, tambien llamado Coliseo por su proximidad a una colosal estatua de Nerón de mas de 30 metros.

El Coliseo fue iniciado por Vespasiano y construido en un breve plazo de tiempo, con la ayuda de una compleja maquinaria y mano de obra especializada.

Con capacidad para 50.000 personas sentadas, acogia espectáculos de masas que duraban varios dias: naumaquias o batallas navales, enfrentamiento entre animales personas y salvajes (tigres de la india, osos polares, elefantes, rinocerontes..). Pero lo mas popular era la lucha de los "gladiadores", en su mayor parte prisioneros de guerra o esclavos a los que se adiestraba para la lucha; aunque también había hombres libres que salian a la arena por simple gusto o por ganar fama y fortuna.

En ocasiones, si la gente lo pedía y la máxima autoridad lo permitía, se perdonaba la vida de los gladiadores que habian hecho un gran combate. Pero lo habitual era que lucharan literalmente hasta morir. Para comprobar si un luchador realmente habia muerto o se lo estaba haciendo, se le aplicaba un hierro al rojo, y si no se movia certificaban el fallecimiento, pero si se movia, le afeaban la conducta y le invitaban a regresar a la arena y cumplir con su trabajo

A partir del siglo VI, el Coliseo cayó en el abandono, y durante los siglos XV y XVI, el mármol travertino que lo recubría fue arrancado para reutilizarlo en otras construcciones. Entre otras, se utilizó para el Palacio Barberini. De ahí el conocido dicho latino que reza "Quod non fecerunt Barbari, fecerunt Barberini" (lo que no hicieron los bárbaros, lo hicieron los Barberini).
A pesar de tantos avatares, expolios, guerras y terremotos, el Coliseo sigue en pie y hace poco ha sido declarado una de las siete maravillas del mundo

amica veritas, sed magis amicus plauto

Hace ya algunos años, paseaba yo por la calle Tarnok de Budapest, con la mirada atenta del viajero, cuando me sobrevino un estremecimiento que en un principio confundí con un retortijón intestinal. Sin embargo, cuando profundicé un poco más en el autodiagnóstico, entendí que en realidad lo que me sobrecogía era la contemplación de tanta belleza, una especia de mal de Sthendal en versión austrohúngara.



En aquel momento pensé que sería muy egoísta reservarme esa experiencia y decidí compartirla con aquellos a los que el destino no les habia deparado la oportunidad de visitar esa ciudad. Pero tambien con los que habían pasado por allí y no habían experimentado esa fruición contemplativa, como vaca sin cencerro, acaso porque la naturaleza les había negado esa sensibilidad exquisita con la que a mi me había dotado tan generosamente.



Llevado por este altruista impulso, me agencié un cuaderno y un rotulador Edding y empecé a esbozar dibujos como un poseso, en el afán de reflejar cuanto encontraba en mi camino y de plasmar mis impresiones de una manera mas o menos perdurable. Así nació el primer ejemplar de los cuadernos de viaje que componen esta colección. A partir de entonces -a la manera de los viajeros clásicos como Delacroix o Víctor Hugo- siempre que me dispongo a emprender un nuevo viaje, reservo en mi maleta un sitio para el cuaderno, entre los gayumbos y el neceser.



Debido a la desmesura de alguna de las opiniones vertidas en estas crónicas, la cautela aconsejaba ocultar mi identidad. Para evitar ser objeto de persecución política, decidí ampararme en el anonimato, inventando un alter ego al que llamé el aventurero. Aun así, mis detractores opinan que tal grandilocuencia no era sino una excusa que para poder hablar de mi mismo en tercera persona, como Julio Cesar o el Papa.



Nadie espere encontrar en estas páginas una guía de viaje, ni un exhaustivo glosario de monumentos. Ni una descripción fiel de los lugares visitados, ni una reflexión sensata sobre los usos y costumbres. Tan solo un inconexo puñado de dibujos, acompañados por el relato de anécdotas carentes de interés y algunos datos totalmente prescindibles e inexactos. Esa es otra: Ni siquiera puedo garantizar la fiabilidad de los textos. A menudo son cosas que he oído o leído aquí y allá, cuando no son directamente inventadas, fruto de una trasnochada imaginación, como muy bien han señalado algunos de mis detractores.



En la última secuencia de la película de Jonh Ford “El hombre que mató a Liberty Balance”, James Stewart le reprocha a un periodista la falta de rigor en algunas informaciones publicadas. El periodista se defiende: “Mira, James Stewart, en el oeste cuando la leyenda mola mas que la realidad imprimimos la leyenda”.



Con similar menosprecio a la verdad, yo, que solo pretendo evidenciar la paradoja del alma humana, escribo desde una ignorancia que haría avergonzarse, no ya a cualquier historiador aficionado, sino a cualquier persona de bien.



Vayan pues mis excusas para todos aquellos a quienes no correspondo con la veracidad que se merecen. En cualquier caso, espero que quienes recalen por estas páginas encuentren aquí motivo de solaz y esparcimiento, ya que otra cosa no pretendo.



Ahora, merced al avance de las nuevas tecnologías y para estupor de mis dichosos detractores, estos cuadernos pueden ser consultados en la red y quedan al alcance tanto de los curiosos como de los estudiosos de esta basta y vasta obra.

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