jueves, 23 de febrero de 2012

pinares

El joven Tai Sung preguntó a su maestro:

- Maestro ¿Cómo puedo ver a través de los ojos de otras personas?
- Discípulo mio, eso que me planteas no te lo puedo resolver, pero puedo mostrarte el camino para que tu mismo halles la respuesta. Sube a lo alto de aquella montaña, sientate debajo de aquel árbol y cierra los ojos. Cuando sientas que sus ramas han penetrado en tu mente podrás volver.

Mientras el joven Tai Sung se alejaba rumbo a la cumbre, el maestro pensó para sus adentros
- A ver si así me deja en paz un rato y puedo fumarme una pipita de opio tranquilamente, sin que me maree con sus preguntitas.

jueves, 16 de febrero de 2012

XIA WUDONG, el hijo del pescador


En la remota región de Cheng Kuo vivia un hombre muy pobre que había perdido a su esposa hacía mucho tiempo y sólo tenía un hijo llamado Xia Wudong. Padre e hijo vivían humildemente de la pesca que conseguían en el rio.Un día que estaban pescando en su pequeña barca, apenas extendieron la red atraparon una carpa muy grande. Padre e hijo se pusieron muy contentos, pero por más fuerza que hacían no conseguían levantar la red.

¿Qué hacer? No les quedaba otro remedio que cortar el pez en varios pedazos para sacarlo del agua. Así lo pensó el hombre y le ordenó al joven:

- ¡Xia Wudong, ve a casa a traer el hacha!
El muchacho salió corriendo hasta su casa y en ese mismo momento el pez habló.
- Buen hombre, ¡sálvame, te lo ruego! – imploró –. Yo también tengo hijos. Si me sueltas yo y mis hijos te quedaremos muy agradecidos y de ahora en adelante te ayudaremos cuando estés en dificultades.

- Como puede ser que un pez hable! - pensó el padre- Debe ser la reencarnación de un ser superior. Criatura tan especial debe ser salvada deinmediato. Debo soltarla rapidamente antes de que se asfixie.

Pero justo en el momento en que iba a liberar a la carpa de la red, apareció Xia Wudong y le pegó un hachazo en la cabeza.

El padre se quedó cabizbajo por la muerte de esa extraordinaria criatura, pero cuando Xia Wudong se la sirvió cocinada en la mesa, con su refrito de ajos y su perejil y sus patatitas, olvidó rápidamente sus tribulaciones.

(Cuento ligur, adaptado)

martes, 14 de febrero de 2012

la carpa en el estanque dorado


A juzgar por la ausencia de comentarios, no pareceis entusiasmados con el giro orientalista de mi carrera.

No me importa, sigo mi camino, inasequible al desaliento. O mas bien permanezco inmóvil como la montaña, sumido en mi recogimiento espirirtual. En este viaje introspectivo hacia el conocimiento, escucho vuestros silencios, y me siento arropado. Sé que estais ahí, agazapados tras vuestros teclados, como Enjuto Mojamuto un dia de lluvia, y eso me reconforta.

domingo, 12 de febrero de 2012

La lección

El joven Kuai Chan Kei se dirigió a su maestro para participarle sus temores

- Maestro, tengo miedo
- ¿No será tu propio miedo, joven Kuai Chan? – preguntó el maestro
- Si, maestro – respondió el joven discípulo, retirandose con humildad, pero a la vez un poco cansado ya de no conseguir nunca sacarle a su maestro una solución concreta para ningún problema

-Que hombre este, siempre se sale por peteneras - pensó para si el joven Kuai Chan Kei.




viernes, 10 de febrero de 2012

loto

La flor del loto es uno de los más antiguos y profundos símbolos de nuestro planeta, y una de las plantas mas singulares. Solo en China se conocen mas de 300 especies.

El loto crece en el fango y se alza sobre la superficie para florecer con delicada belleza.
Al anochecer, la flor se cierra y se hunde bajo el agua, y al amanecer, se alza y vuelve a abrirse. El loto simboliza la pureza del corazón y de la mente, pues está dotada de un ingenioso sistema de auto limpieza, causado por la tension superficial de sus hojas, que impide que el polvo se deposite y lo mantiene libre de impurezas.

Sus semillas pueden germinar despues de haber estado enterradas durante cientos e años. Por eso la flor del loto representa longevidad, salud, honor y Buena fortuna.

jueves, 9 de febrero de 2012

el espiritu de valle

El espíritu del valle nunca muere.

Es la madre secreta.

La puerta de la madre secreta
es la raíz del cielo y de la tierra.

Sutil, sin interrupción, continuamente perdura;

pero su actividad no cesa nunca.


Lao-Tse
Tao Te King, canto VI

domingo, 5 de febrero de 2012

lejano oriente

De un tiempo a esta parte, me estoy dedicando a hacer dibujos de inspiración oriental. Me paso el dia pintado bambus, orquideas y flores de loto. Repito una y otra vez los mismos motivos, en busca de un conocimiento que esta ahí, flotando en el aire como las notas de música, esperando a ser desvelado.

El proceso es sutil: advierto el fluir de la naturaleza, lo observo, lo interiorizo y finalmente dejo que el pincel se deslice sobre el papel de arroz.  De las manchas y lineas empiezan entonces a emerger  formas delicadas, etereas, que van tomando cuerpo poco a poco. El resultado suele ser  una gran paz en mi espiritu y un churro malagueño en el papel.

Sin embargok, he iniciado un irreversible camino de perfeccionamiento. Para  impulsar esta transormación interior, mas pronto que tarde, habré de emprender un viaje hacia oriente. Alli intentaré buscar respuesta a tantos interrogantes que me acucian. Ante todo debo resolver la Gran Pregunta que todos debemos afrontar: ¿tendré moscosos suficientes para acometer tan ambicioso recorrido?


sábado, 4 de febrero de 2012

pagasarri


Aunque el temporal de frio arreciaba, mi decisión de ascender al Pagasarri era firme. Desafiando a la  intensa nevada, acometí la empresa, como un anciano desdentado dirigiendose al Narayama, acompañado unicamente de un maltrecho cayado.

Muchas fueron las penosidades del camino, pero a cada paso que daba mayor era mi determinación.


Cuando consegui hollar la cumbre, la tormenta amainaba y la nieve caía ya lentamente sobre mi corazón . Alli arriba, en la cima de la montaña sagrada, recogido en la soledad de mis pensamientos, el recuerdo de tu sonrisa me inspiró este haiku:

Caerá la nieve
sobre tus comisuras
y mis varices







ah, y en el camino me encontre con el critico Larrauri, que conmovido por mi  exiguo equipamiento, me prestó unos guantes

amica veritas, sed magis amicus plauto

Hace ya algunos años, paseaba yo por la calle Tarnok de Budapest, con la mirada atenta del viajero, cuando me sobrevino un estremecimiento que en un principio confundí con un retortijón intestinal. Sin embargo, cuando profundicé un poco más en el autodiagnóstico, entendí que en realidad lo que me sobrecogía era la contemplación de tanta belleza, una especia de mal de Sthendal en versión austrohúngara.



En aquel momento pensé que sería muy egoísta reservarme esa experiencia y decidí compartirla con aquellos a los que el destino no les habia deparado la oportunidad de visitar esa ciudad. Pero tambien con los que habían pasado por allí y no habían experimentado esa fruición contemplativa, como vaca sin cencerro, acaso porque la naturaleza les había negado esa sensibilidad exquisita con la que a mi me había dotado tan generosamente.



Llevado por este altruista impulso, me agencié un cuaderno y un rotulador Edding y empecé a esbozar dibujos como un poseso, en el afán de reflejar cuanto encontraba en mi camino y de plasmar mis impresiones de una manera mas o menos perdurable. Así nació el primer ejemplar de los cuadernos de viaje que componen esta colección. A partir de entonces -a la manera de los viajeros clásicos como Delacroix o Víctor Hugo- siempre que me dispongo a emprender un nuevo viaje, reservo en mi maleta un sitio para el cuaderno, entre los gayumbos y el neceser.



Debido a la desmesura de alguna de las opiniones vertidas en estas crónicas, la cautela aconsejaba ocultar mi identidad. Para evitar ser objeto de persecución política, decidí ampararme en el anonimato, inventando un alter ego al que llamé el aventurero. Aun así, mis detractores opinan que tal grandilocuencia no era sino una excusa que para poder hablar de mi mismo en tercera persona, como Julio Cesar o el Papa.



Nadie espere encontrar en estas páginas una guía de viaje, ni un exhaustivo glosario de monumentos. Ni una descripción fiel de los lugares visitados, ni una reflexión sensata sobre los usos y costumbres. Tan solo un inconexo puñado de dibujos, acompañados por el relato de anécdotas carentes de interés y algunos datos totalmente prescindibles e inexactos. Esa es otra: Ni siquiera puedo garantizar la fiabilidad de los textos. A menudo son cosas que he oído o leído aquí y allá, cuando no son directamente inventadas, fruto de una trasnochada imaginación, como muy bien han señalado algunos de mis detractores.



En la última secuencia de la película de Jonh Ford “El hombre que mató a Liberty Balance”, James Stewart le reprocha a un periodista la falta de rigor en algunas informaciones publicadas. El periodista se defiende: “Mira, James Stewart, en el oeste cuando la leyenda mola mas que la realidad imprimimos la leyenda”.



Con similar menosprecio a la verdad, yo, que solo pretendo evidenciar la paradoja del alma humana, escribo desde una ignorancia que haría avergonzarse, no ya a cualquier historiador aficionado, sino a cualquier persona de bien.



Vayan pues mis excusas para todos aquellos a quienes no correspondo con la veracidad que se merecen. En cualquier caso, espero que quienes recalen por estas páginas encuentren aquí motivo de solaz y esparcimiento, ya que otra cosa no pretendo.



Ahora, merced al avance de las nuevas tecnologías y para estupor de mis dichosos detractores, estos cuadernos pueden ser consultados en la red y quedan al alcance tanto de los curiosos como de los estudiosos de esta basta y vasta obra.

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